París (2/3)

Como no podía ser de otra forma, París es nuestro primer destino; es la capital de Francia, así como su ciudad más importante a nivel tanto nacional como internacional. ¡Gracias a la web «https://www.paris.es» podríamos recorrer la ciudad de la luz en tan solo un fin de semana!

En esta entrada abordaremos lo que sería el segundo día de la escapada: el intermedio (sábado).

Siguiendo el plan propuesto por la web, empezaríamos el día más intenso visitando l'Hôtel des Invalides. Para llegar al lugar deberíamos de buscar la parada de metro más cercana al hotel donde nos hospedásemos: Invalides, Varennes o La Tour-Maubourg. En su interior, bajo la cúpula central, descansan los restos de Napoleón. Junto al Hôtel des Invalides se encuentra le Musée Rodin, en cuyo jardín se hallan algunas de las obras del escultor. 

Al cruzar la explanada del Hôtel des Invalides nos ubicaríamos en le Pont Alexandre III, una de las maravillas de la ciudad. Desde allí tendríamos a la vista le Gran Palais y le Petit Palais, este último de acceso gratuito, situados en l'Avenue Winston-Churchill. La avenida desemboca en les Champs-Élysées, donde a mano izquierda, en una plaza contigua, se halla l'Arc de Triomphe de l'Étoile. En lo alto del monumento es posible ver París desde una perspectiva diferente a cualquier otra.

Volviendo a les Champs-Élysées, y después de una larga caminata, acabaríamos en la Place de la Concorde, donde se alza l'Obélisque de Luxor. Podríamos considerar la plaza como un punto de partida de la ciudad, pues limita al oeste con les Champs-Élysées, al este con les Jardins de Tuileries, al sur con l'Assemblée National, y al norte con l'église de la Madeleine. 

Dirección a l'église de la Madeleine, recorreríamos la Rue Royal, una de las calles comerciales más reconocidas de París. Si por el contrario decidiéramos dirigirnos hacia el este, atravesando les Jardins de Tuileries, terminaríamos junto al archiconocido Musée du Louvre que, a su vez, dirección norte, comunica con l'Avenue de l'Opéra, avenida que alberga el edificio de la Ópera de París. En el caso de tener tiempo, no perdamos la oportunidad de acercarnos al Musée Grévin, el museo de cera de la capital gala, sentido este a la Ópera de París.

Antes de finalizar el día, sería aconsejable acercarse a Montmartre. En el caso de estar exhaustos, podríamos coger el metro, sin embargo, si quisiéramos aprovechar la escapada al máximo, caminaríamos por la Rue Montmartre hasta llegar a la Place Blanche, donde se encuentra el cabaret más famoso del mundo, le Moulin Rouge. Si no nos pudiéramos permitir tomarnos algo mientras presenciamos algunos de sus espectáculos, sea por el horario nocturno o por el alto precio de sus entradas, no tendríamos más que subir a la parte alta de Montmartre.

Para ello, pondríamos rumbo este por le Boulevard de Clichy (una zona bohemia con gran actividad nocturna) hasta llegar a la parada de metro Anvers. Allí podríamos decantarnos entre utilizar el funicular o subir unas 200 escaleras. En lo más alto se halla la Basilique du Sacré-Coeur. Próxima a la basílica se encuentra la Place du Tertre (también conocida como la «Plaza de los Pintores»), uno de los lugares más calmados y económicos de París.

Fuente: Inf.Tour París; Img.Arc de Triomphe de l'Étoile